Mayordomía

Todo de mí en respuesta a todo de Dios.
El Ministerio de Mayordomía se basa en los siguientes textos:
“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento” (Mar. 12:30).
“Desde la cruz del Calvario, Cristo nos pide una consagración sin reservas. Todo lo que tenemos y todo lo que somos, lo debiéramos dedicar a Dios” (Patriarcas y profetas, p. 185)
Por lo tanto, Mayordomía no solo es talento, templo, tesoro y tiempo, como se predicaba en el pasado, sino que es todo.

Apoyar activamente la misión de la Iglesia (hacer discípulos) mediante mayordomos fieles y espiritualmente reavivados diariamente.

El Ministerio de Mayordomía tiene como visión la promoción del crecimiento espiritual de una comunidad de fieles mayordomos adventistas del séptimo día, y para ello, tiene como propósitos:

  • Capacitar a los miembros y líderes a implementar los principios de mayordomía cristiana.
  • Presentar el estilo de vida en el cual la persona vive en unión y sociedad con Dios según la Biblia.
  •  Animar a los miembros y ministerios a crecer en la comunión habitual con Dios, de manera que permitan que el Espíritu Santo los conduzca en adoración, dedicando su cuerpo, mente, tiempo, talentos, dones espirituales, capacidad de relacionarse con otros, influencia, lenguaje, medio ambiente y bienes materiales.
  • Mostrar el papel del Espíritu Santo como guía, en el contexto de la comunión para la práctica de la beneficencia sistemática.
  • Presentar las verdades bíblicas en relación a los diezmos y ofrendas como elementos de adoración que son devueltos a Dios y que él destina como recursos para proveer el sustento financiero de la Iglesia, como cuerpo de Cristo.

Según los Reglamentos Eclesiástico-Administrativos de nuestra Iglesia, el Ministerio de Mayordomía Cristiana, es responsable por promover y enfatizar:

  1. Cuidado de la vida espiritual. La experiencia diaria con Dios es un factor determinante en el cumplimiento sistemático de los principios de la mayordomía cristiana.
  2. Renovación espiritual. La renovación y el crecimiento espiritual de los miembros de iglesia deben ser el fundamento de todos los planes del Ministerio de Mayordomía Cristiana.
  3. Confianza en la Organización. Profundizar la confianza en la estructura administrativa y en los diversos ministerios de apoyo.
  4.  Gerenciamiento de la vida personal. Dar una visión bíblica de los peligros del secularismo y del materialismo.
  5.  Administración cristiana del dinero. La manera como las personas usan el dinero es un reflejo de su caminar con Dios. El amor al dinero puede ser un sustituto de Dios.
  6. Plan de sostén financiero de la Iglesia. Educar a la Iglesia con la visión de que los diezmos y ofrendas le pertenecen a Dios, y son los medios para mantener el Ministerio, la misión y los templos.